Hoy en día nadie duda de la influencia que tienen las nuevas tecnologías en nuestras vidas. La nueva sociedad creada por Internet ha significado un antes y un después en el mundo del arte. Un soporte como el vídeo ya está al alcance de cualquiera y forma parte de la vida cotidiana de la mayoría de personas. Hace 50 años, cuando pioneros en el videoarte como Nam June Paik apostaban por un nuevo medio de expresión, nadie podía imaginar hasta dónde llegaría el vídeo dentro del mundo del arte. Las primeras grabaciones de Paik o Frank Gillette despertaron en muchos jóvenes inquietos un mundo nuevo para dar forma a sus ideas y reflexiones cogiendo un objeto popular como la televisión y llevándolo a las galerías de arte.
Hoy en día el vídeo ya ocupa un lugar preferente en la mayoría de las colecciones más prestigiosas del mundo y muchos son los grandes museos que dedican su espacio a retrospectivas de artistas como Gary Hill o Bill Viola.
Los seguidores del videoarte estamos de enhorabuena ya que estos días podemos ver una exposición que no dejará indiferente a nadie. La Fundació Joan Miró (Barcelona) acoge la exposición dedicada a la artista Pipilotti Rist. Las ocho obras que podemos ver en la muestra nos introducen en el mundo mágico de colores y texturas tan típico de la artista suiza. Ella misma en el documental Tha colour of your socks define su obra como "un poema de colores y sonidos". El espacio museístico tal y como lo conocemos desaparece en virtud del espectador. Éste, protagonista indiscutible, entra dentro de la obra y se instala en ella para vivir una experiencia a través de los sentidos. El cromatismo de las obras nos provocan una sensación de bienestar y de positividad nada común en estos tiempos. Ella misma reconocia esta intención cuando le entregaron el premio Joan Miró, "lo que busco es que la gente salga alegre y, a ser posible, esperanzada".
Hoy en día el vídeo ya ocupa un lugar preferente en la mayoría de las colecciones más prestigiosas del mundo y muchos son los grandes museos que dedican su espacio a retrospectivas de artistas como Gary Hill o Bill Viola.
Los seguidores del videoarte estamos de enhorabuena ya que estos días podemos ver una exposición que no dejará indiferente a nadie. La Fundació Joan Miró (Barcelona) acoge la exposición dedicada a la artista Pipilotti Rist. Las ocho obras que podemos ver en la muestra nos introducen en el mundo mágico de colores y texturas tan típico de la artista suiza. Ella misma en el documental Tha colour of your socks define su obra como "un poema de colores y sonidos". El espacio museístico tal y como lo conocemos desaparece en virtud del espectador. Éste, protagonista indiscutible, entra dentro de la obra y se instala en ella para vivir una experiencia a través de los sentidos. El cromatismo de las obras nos provocan una sensación de bienestar y de positividad nada común en estos tiempos. Ella misma reconocia esta intención cuando le entregaron el premio Joan Miró, "lo que busco es que la gente salga alegre y, a ser posible, esperanzada".
