
El museo Guggenheim de Bilbao está de aniversario. 13 años han pasado des de que el otoño del 2007 abriera sus puertas al público. Fruto de la colaboración entre la Salomon R. Guggenheim Foundation y el Gobierno Vasco, su mastodóntica silueta se funde con la ría del Nervión, convirtiendo su estampa en un símbolo de la capital vasca. Si hay algo que impresiona cuando llegas a Bilbao es el edificio obra de Frank Gehry, un enorme monstruo de titanio. No importa las veces que visites la ciudad, el impacto es el mismo.
Su construcción supuso la regeneración de una de las zonas en clara decadencia de la ciudad. Un espacio industrial venido a menos que hacía que los ciudadanos vivieran de espalda a la ría, una ría que con la construcción del museo se volvió a recuperar con una zona de paseo abierta al público. El Guggenheim es un ejemplo de como los centros culturales no sólo cumplen una función en la conservación del patrimonio artístico sino como un factor social a tener en cuenta a la hora de rehabilitar un espacio desaprovechado de la ciudad y que, gracias a iniciativas como esta, se puede recuperar para uso y disfrute de los ciudadanos.
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ResponderEliminarWow, només 13 anys????
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